Fuente: Agencias internacionales.
Una megaoperación policial contra el crimen organizado en las favelas de Río de Janeiro dejó más de 60 integrantes del narcotráfico muertos y al menos cuatro policías fallecidos, según el balance más reciente de las autoridades brasileñas.
El operativo, considerado el más letal en la historia del estado de Río, movilizó a más de 2,500 agentes que ingresaron a las comunidades de Penha y Alemão, en la zona norte de la ciudad, con el objetivo de recuperar el control territorial. Durante los enfrentamientos, los narcotraficantes del Comando Vermelho, una de las mafias más poderosas de Brasil, respondieron con fusiles y drones que lanzaban explosivos.

Además, las fuerzas de seguridad confiscaron decenas de armas largas y capturaron a más de 80 personas vinculadas al crimen organizado.
El gobernador de Río de Janeiro, Claudio Castro, defendió la operación como una acción necesaria para restablecer el orden, aunque criticó al gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva por no enviar apoyo militar ni integrar fuerzas federales al operativo.
La jornada también provocó un caos generalizado en la ciudad: delincuentes levantaron barricadas e incendiaron vehículos, más de 100 líneas de autobús modificaron su ruta y decenas de escuelas suspendieron clases.
El ayuntamiento de Río declaró el nivel de alerta, recomendando a la población evitar desplazamientos y mantenerse en lugares seguros mientras continúan las operaciones policiales.











