Por Fernando Castellanos |
El “Día Mundial de la Radiografía” se celebra el 8 de noviembre de cada año, con motivo del aniversario del descubrimiento de los rayos X por Wilhelm Roentgen en 1895.
El objetivo fundamental de todas las técnicas radiológicas es prolongar la vida de las personas y disminuir la morbilidad. La realización eficiente y segura de los procedimientos de diagnóstico y tratamiento con fuentes de radiación exige que el personal que los lleva a cabo esté adecuadamente formado y entrenado.
Gracias a la radiología hoy en día se pueden curar fracturas, poner prótesis adecuadas a cada situación, observar la evolución y desarrollo de los fetos y poder conocer la condición real de un cerebro. Y todo esto, sin tener que someter a una persona a cirugía u otro tipo de intervenciones dolorosas.