Por Moisés Cottom |
El 4 de abril de 1968 falleció Martín Luther King, líder del movimiento por los derechos civiles de los afroestadounidenses, después de recibir un disparo mientras se encontraba en el balcón de un Motel en Memphis, Tennessee.
La bala, disparada por el convicto James Earl Ray, atravesó la mandíbula y alcanzó la médula espinal de Luther King, quien fue llevado inmediatamente al hospital, en donde lo declararon muerto, a los 39 años.
En marzo de ese mismo año, había viajado a Memphis para liderar una protesta, durante la cual un adolescente afroestadounidense perdió la vida. Luther King se marchó de Memphis, prometiendo regresar al mes siguiente.
De vuelta en la ciudad, un día antes de su muerte, dio su último sermón. Fue enterrado el 9 de abril en Atlanta, Georgia, su ciudad natal, mientras miles de personas salían a las calles para rendirle homenaje.
Vía History