Por Mario Tumin |
Este jueves y viernes maestros se integran a la Asamblea Permanente convocada por el Sindicato de Trabajadores de la Educación de Guatemala (STEG) y por ello suspenderán clases.
La próxima semana, según lo anunciado por el magisterio, las clases serán irregulares (un día sí y otro no). Los maestros exigen mejoras en la educación y un aumento salarial.
La organización sindical rechaza la ideología de género en las escuelas, además pide un incremento al presupuesto para la alimentación escolar que en la actualidad es de Q6 por alumno y ellos requieren Q10.
El 30 de abril, en conferencia de prensa, el presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, y la ministra de Educación, Anabella Giracca, anunciaron un aumento del 5 por ciento al salario de los maestros, pero los sindicalistas dicen que no fue legal porque fue fuera del pacto.
Los sindicalistas también exigen la renuncia de la actual directora departamental de Educación. La mayoría de padres de alumnos están inconformes con estas acciones de las clases irregulares, porque eso afecta a los niños.
