Por Moisés Cottom |
La Delegación Regional de la Procuraduría General de la Nación (PGN) en Quetzaltenango atendió una denuncia sobre dos hermanos, quienes se encontraban en una situación de alto riesgo en el caso urbano del departamento, pues uno de ellos estaba sentado entre los carriles vehiculares.
Los profesionales de PGN se presentaron al lugar, sin especificar más datos, y verificaron la situación.
La madre indicó que no tenía con quien dejar a sus hijos, de 4 y 7 años, por ello, el personal la concientizó sobre el riesgo que corren en la calle y los llevó a un Centro de Atención Integral de la Secretaría de Bienestar Social para que, mientras ella trabaja, los niños permanezcan en un lugar seguro.
«PGN hace un llamado a la población y medios de comunicación a realizar la denuncia por los canales respectivos al tener conocimiento de hechos que vulneran los derechos de la niñez y adolescencia», indica una publicación de la institución.
