Por Rubén Jocol |
Este miércoles vecinos de nueve comunidades de Cantel, Quetzaltenango, se reúnen en el sector Llanos de Urbina —ingreso a la Granja Penal Modelo de Rehabilitación Cantel— en rechazo a la habilitación de un templo a la Santa Muerte, a partir del 31 de este mes. Por el momento el paso vehicular está bloqueado.
«La comunidad de Urbina y demás comunidades de Cantel rechazamos totalmente el templo a la Muerte o cualquier organización con el mismo fin que contra venga nuestros principios y valores. No a la Muerte, sí a la vida», indica la manta colocada por los pobladores.
Templo traerá violencia
El alcalde comunitario del sector 4 de Urbina, Cantel, Quetzaltenango, Abelino García, dice que exigen la anulación de la inscripción del templo dedicado a la Muerte.
«La comunidad lo ve con mucha preocupación porque seguramente lo que va a traer en mucha violencia», indica García, quien añade que el próximo sábado habrá una marcha en rechazo a la construcción del templo.
El alcalde de Cantel, Quetzaltenango, Alan Cabrera, llegó al lugar e indicó que no han autorizado la construcción del templo a la Santa Muerte en Urbina.
Al lugar llegó una unidad de la Policía Nacional Civil (PNC) y por el momento se desconoce quiénes solicitaron la construcción del templo a la Santa Muerte.
La PNC informó que en allanamientos en inmuebles, donde viven pandilleros, han encontrado altares a la Santa Muerte. El Consejo Ecuménico de México, el cual es integrado por varias iglesias cristianas, indicó que el culto a la Santa Muerte es totalmente incompatible con el mensaje de Cristo.