Al menos dos periodistas nicaragüenses vinculados a la Iglesia católica fueron detenidos este fin de semana por la Policía Nacional sin que se conozcan las razones, reportaron diversos medios locales.
Se trata de Manuel Obando Cortedano, periodista de la Diócesis de Matagalpa, que era quien estaba a cargo de los medios de comunicación afín a la iglesia local; de igual forma Wilberto Artola, quien trabajaba en el canal de televisión por cable TV Merced, perteneciente también a la Iglesia católica.
El medio local de Nicaragua Mosaico informó que las autoridades policiales también buscaban a otros extrabajadores pertenecientes a la Iglesia católica y que fueron cancelados en septiembre de este año.
De acuerdo con una recopilación realizada por la Voz de América, fueron 17 medios de comunicación a los cuales se le anularon los permisos para operar en Nicaragua en agosto de este año, la mayoría de estos pertenecían a la Iglesia católica.
En el caso de Obando Cortedano, se desempeñaba junto a monseñor Rolando Álvarez, un obispo crítico al presidente Daniel Ortega, quien se encuentra retenido en una vivienda en Managua sin que se le permita la salida.
Las autoridades han dicho que «está bajo resguardo domiliciar», sin embargo los críticos señalan que es «casa por cárcel de facto».
El obispo Álvarez fue sacado por la Policía de la casa cural donde se encontraba el pasado 19 de agosto, en la ciudad de Matagalpa.
Álvarez fue trasladado a una vivienda «de un familiar», mientras que quienes lo acompañaban fueron trasladados a la cárcel de el Chipote, en Managua.
El mandatario Daniel Ortega ha tildado a los sacerdotes de «golpistas» y que según él, intentaron tumbar su gobierno en 2018, que surgieron protestas que dejaron más de 300 muertos.
Información Houston Castillo Vado / Voz de América / Fotografía La Prensa
