Con información de la página: Santísima Virgen del Rosario Quetzaltenango
Este 07 de octubre es el Día de la Virgen del Rosario, patrona del pueblo de Quetzaltenango.
Como parte de la festividad de Nuestra Señora del Santísimo Rosario, la página «Santísima Virgen del Rosario Quetzaltenango», presentó una galería fotográfica de la imagen de la Parroquia del Espíritu Santo «Catedral» y el significado del ajuar que porta.
Explicación:
«Se dice que Guatemala es el país de la “Eterna Primavera” por su clima agradable durante todo el año.
El ajuar que luce nuestra Señora del Santísimo Rosario, hace un homenaje a nuestra Patria Guatemala, al ser uno de los países con mayor belleza natural y diversidad cultural.
- Flor del Café: Significa esperanza y alegría.
- Joyería: Juego de collar, aretes y anillo.
El collar está formado por 100 perlas que representan el centenario de la creación de la Diócesis, hoy Arquidiócesis de los Altos, el centro conformado por la Paloma del Espíritu Santo que representa a la Parroquia, tres Monjas Blancas que significan la Santísima Trinidad, los topacios, que representan el cielo, mares, lagos y ríos de nuestro país.
Virgen del Rosario
El origen de este día se remonta al año 1208 cuando la Virgen María se le apareció a Santo Domingo de Guzmán, le entregó el Santo Rosario y le enseñó cómo rezarlo. Además, le encomendó al español que se convirtiese en propagador de esta devoción.
Uno de los episodios históricos que ha sido determinante en la historia de la difusión del Rosario fue la ‘Batalla de Lepanto‘ (7 de octubre de 1571). En ella una coalición de tropas y fuerzas navales cristianas se enfrentaron a la armada del Imperio (turco) Otomano con el propósito de detener sus ambiciones expansionistas en Occidente y recuperar soberanía alrededor del Mediterráneo.
Los cristianos, antes de la batalla, se encomendaron a la Virgen y rezaron el Santo Rosario. La victoria contundente que se produjo posteriormente fue atribuida a la intercesión de la Virgen.
En el siglo XVI, San Pío V instauró su conmemoración litúrgica el 7 de octubre, justamente en el aniversario de la victoria en la Batalla de Lepanto. Juan Pablo II manifestó en 1978 que el rosario era su oración preferida, lo mismo afirmó el Papa Francisco en 2016, quien aseguró que era la oración que acompañaba su vida.