Por Fernando López |
Catarino López Bravo y su hijo, Yener López Temaj, mueren calcinados tras intentar sofocar un incendio forestal en la aldea La Grandeza, Cabricán, Quetzaltenango, cerca de la comunidad La Vega, San Isidro, Comitancillo, San Marcos.
Al igual que varios comunitarios de ambos municipios, trataban de sofocar el siniestro, pero quedaron atrapados entre el fuego.
Autoridades locales han confirmado el incidente y apoyado a la familia para los gastos funerarios.