En entrevista exclusiva a RFI, la jueza guatemalteca Erika Aifán, figura clave en la lucha contra la corrupción en Guatemala, denunció las ‘estructuras político-criminales’ de su país, las cuales ‘han cooptado los tres poderes del Estado’ y mantienen la corrupción y la impunidad que las beneficia.
«He decidido presentar mi renuncia al cargo porque no cuento con garantías suficientes de protección a mi vida», dijo la jueza guatemalteca Erika Aifán en un video difundido en Twitter.
La exjueza se exilió en Estados Unidos por temor de atentados en su contra.
La jueza entra a formar pare de la lista de 15 magistrados guatemaltecos que se han ido del país en solo un año.
Erika Aifán ha denunciado un pacto en la Corte Suprema para encarcelarla. También teme que agentes del Estado puedan atentar contra ella si sigue viviendo en el país.
Entrevista de RFI a la jueza Erika Aifán:
RFI. ¿Cómo explica Usted la difícil situación de la justicia hoy en Guatemala, un país acosado por la corrupción y la impunidad?
Creo que es algo que viene de antes y que está relacionado con estructuras político-criminales que han cooptado los tres poderes del Estado. No solamente el ejecutivo, sino también el legislativo y el poder judicial. Por eso hablo de una ruptura del Estado de derecho porque creo que en este momento en Guatemala no hay una garantía de un debido proceso, del respeto de los derechos humanos. Los jueces y juezas somos los primeros defensores de los derechos humanos. Sin embargo, se nos está negando el derecho a defender derechos.
RFI. ¿De qué manera se les niega ese derecho?
A través de múltiples acciones: amenazas, intimidaciones, hostigamiento, seguimiento de vehículos sin placas, vigilancias en nuestras casas, en nuestros lugares de trabajo, constantes seguimientos y grabaciones por parte de personas desconocidas. Así vemos la vulnerabilidad en la que se encuentran todas las ciudadanas y ciudadanos del país.
RFI. ¿A quien cree usted que beneficia esa ruptura del estado de derecho en Guatemala?
A las estructuras político-criminales. Es parte de la forma en que operan para mantener la corrupción y la impunidad. Su objetivo era detener los avances en las investigaciones de los casos de alto impacto. En el juzgado a mi cargo, había un proceso al que algunos actores denominaron públicamente la ‘multi-causa’. Ese proceso es histórico porque desarrolla investigaciones contra los tres poderes del Estado. El poder ejecutivo, a través de los señalamientos al presidente de la República y a por lo menos a dos de sus ex ministros de comunicaciones. El poder legislativo, en el caso Odebrecht, a través del señalamiento que se hizo de la comisión de posibles de delitos por parte de varios diputados y ex diputados. Y el caso de ex comisiones paralelas, el cual forma parte de esta misma causa, que hace señalamientos a por lo menos siete magistrados titulares de la Corte Suprema de Justicia y algunos otros altos funcionarios de Cortes de Apelaciones y otros sectores como Colegio de Abogados, universidad estatal, etc.”.
Información de RFI.
