19 de octubre de 2003: El Papa Juan Pablo II, ante la presencia de unas 300.000 personas en la Plaza de San Pedro en Roma, beatifica a Teresa de Calcuta, seis años después de su muerte, en un proceso considerado el más rápido en la historia de la Iglesia moderna.
Agnes Gonxha Bojaxhiu nace en Albania y con 18 años decide su vocación de misionera, con el nombre de Teresa. Viaja a Calcuta y comienza su labor enseñando a los niños de los suburbios, vistiendo un simple sari de algodón blanco con rayas azules.
Poco más tarde crea la Congregación de las Misioneras de la Caridad y abre en Calcuta un centro para moribundos, niños abandonados, leprosos y enfermos de SIDA.
En 1979, recibe el premio Nobel de la Paz y un año después el Bharat Ratna, el más alto galardón civil de la India, por su labor humanitaria.
En 2016 el Papa Francisco proclama Santa a la Madre Teresa de Calcuta, en una misa multitudinaria.
Hoy, en su orden de las Misioneras de la Caridad hay más de 5.000 monjas y más de 600 casas de acogida en 130 países.