La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) introdujo la anticoncepción de emergencia para cualquier mujer que haya tenido una relación sexual con posibilidad de embarazo a partir de la publicación del anuncio en el pasado mes de abril.
El anuncio del gobierno costarricense ubica a ese país dentro de los que han seguido las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, la cual la considera parte de los derechos de la mujer para decidir sobre un posible embarazo no deseado.
Según la Organización Mundial de la Salud, las mujeres con riesgo de embarazo no deseado tienen derecho a la anticoncepción de urgencia y por eso los métodos deben integrarse en todos los programas nacionales de planificación familiar.
La anticoncepción de emergencia estaba hasta ahora sólo disponible en los servicios de salud para las mujeres víctimas de agresión sexual.
“Es importante aclarar a la población que estos medicamentos no son abortivos. Como parte de la educación es necesario decir que impiden la concepción, pero no malogran una concepción ya realizada” afirma la ginecóloga Angélica Vargas Campos.
El anticonceptivo de emergencia previene el embarazo de la misma manera como lo hacen las pastillas anticonceptivas regulares: impide o demora la liberación de un óvulo de los ovarios de una mujer o impide que el espermatozoide fertilice al óvulo, explicó Vargas.
Acceso de emergencia.
Según el anuncio del gobierno, la anticoncepción de emergencia puede ser usada por cualquier mujer en edad fértil que la necesite en todos los niveles de atención. La medicación anticonceptiva debe tomarse lo antes posible después de la relación sin protección y dentro de un plazo de 120 horas.
Sin embargo, se indicará a las interesadas que la eficacia de esta anticoncepción se reduce cuanto más se prolongue el intervalo entre la relación sin protección y la toma del medicamento.
La pastilla puede tener efectos secundarios que pueden incluir náuseas, vómitos, ligero sangrado vaginal y fatiga. Estos sin embargo son poco frecuentes y leves. No dañan la fertilidad futura, según la literatura médica.
Embarazos no deseados
La anticoncepción de emergencia también pretende favorecer la disminución de la alta tasa de embarazos no deseados.
Según la Encuesta Nacional de Salud Sexual y Reproductiva realizada por el Ministerio de Salud en el 2015, entre las personas entrevistadas, el 49,8% de las mujeres y 32,2% de los hombres no deseaban su último embarazo.
En algunos casos, porque deseaban esperar a otro momento, según el 13,7% de las mujeres y 10,7% de los hombres, y en otros porque del todo no deseaban tener más hijos, 36,1% de las mujeres y 21,5% de los hombres.
Con información de La Voz de América
