El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, reconoció que la capacidad de la ONU para enfrentar la situación política en Venezuela ha sido limitada.
Según Antonio Guterres, esto se debe a que sus oficinas no pueden actuar hasta que el gobierno en disputa de Nicolás Maduro y el presidente encargado, Juan Guaidó, lo soliciten.
Durante una rueda de prensa el secretario se refirió a Venezuela y Bolivia, dos de los países en América Latina que, según afirmó, generan preocupación en su oficina.
“Hemos apoyado la mediación noruega, desafortunadamente, aún no ha producido resultados, y estamos muy preocupados por el hecho de que la situación sigue sin una solución política, y creemos en una solución política basada en el diálogo, es la única forma de superar estas dificultades”, respondió Guterres a la VOA.
Además, reiteró su compromiso con el pueblo venezolano para seguir proveyendo ayuda humanitaria dentro y fuera de Venezuela. Aludió al trabajo para mejorar en este aspecto y se refirió a problemas como «las limitaciones que existen, por razones de financiación».
Guterres afirmó que se basan en «un respeto muy claro por los principios humanitarios» y para asegurar «que no haya discriminación en la forma en que operamos dentro del país”.
Explicó que también sigue de cerca la situación en Bolivia, tras la asignación de un representante especial de la ONU en ese país, en vísperas de las próximas elecciones previstas para el 3 de mayo.
Sobre la situación en este país, el secretario general dijo que el enviado especial de la ONU ha estado «muy activo» y trabaja para «ayudar a evitar que Bolivia se polarice y entre en un conflicto que sería terrible para la gente y para el futuro del país».
El enviado especial se centra también en «crear las condiciones para el restablecimiento de un proceso democrático normal, con elecciones normales, que tengan lugar en el país».
Con información de Celia Mendoza y colaboración de Karen Sánchez / La Voz de América
