A diario las redes sociales en Venezuela están repletas de mensajes con solicitudes de apoyo económico para costear las hospitalizaciones por COVID-19.
A la recesión económica, la hiperinflación que pulveriza los ingresos de los trabajadores, se le suma un débil sistema de salud pública. Las estadísticas oficiales registran 50.973 infectados y 412 fallecidos.
Venezolanos consultados por la Voz de América contaron que debieron pagar hasta más de 1.800 dólares por un día en un hospital, por lo que se vieron obligados a recurrir a familiares, amigos y hasta desconocidos para saldar deudas en medio de la crisis sanitaria.
«Francisco Rivero no escapó del COVID-19 y está en cuidados intensivos, así que se ha creado un gofundme para ayudar a costear los fondos de la clínica. Al que pueda ayudar hasta con un RT (retuit) se lo agradeceré mucho», escribió el periodista Óscar Prieto en su cuenta en Twitter.
La campaña buscaba reunir 8.000 dólares para cubrir cinco días de atención hospitalaria. Como Prieto, decenas de venezolanos hacen a diario la misma solicitud.
«Si no tienes un buen seguro que te respalde, es impagable», contó a VOA el esposo de una paciente con COVID-19, quien debió cancelar 1.850 dólares por 24 horas de terapia respiratoria, exámenes de laboratorio, tratamiento y honorarios profesionales.
El hombre, cuya identidad prefiere reservarse por temor a represalias, debió recurrir a préstamos de amigos y familiares para cubrir ese día de hospitalización. Explicó que luego debió llevar a su esposa a un centro médico administrado por religiosos, donde las tarifas son subsidiadas.
Desde que la pandemia llegó a Venezuela, el gobierno en disputa de Nicolás Maduro dijo haber habilitado 46 hospitales con 23.000 camas de hospitalización para contagiados con coronavirus.
Sin embargo, este hombre aseguró que no recibió atención en el sistema de Salud Pública gratuito, controlado por el Estado.
«Fuimos a varios hospitales centinela y lo único que te decían era que la podían dejar si era paciente asintomático, pero como tenía una patología, no la podían dejar porque necesitaba terapia intensiva. En casi ninguno dan asistencia médica. Están abarrotados», detalló.
El médico Carlos Prosperi explicó que los costos de las urgencias en los centros privados varían según los servicios y exámenes que deban practicarse.
«Entre 400 y 1.500 dólares cuesta la hospitalización por día en pacientes por COVID-19 porque es un tratamiento costoso y es de larga estadía para el paciente», indicó.
Con información de Adriana Núñez Rabascall / La Voz de América
