El presidente Donald J. Trump, en nombre del pueblo estadounidense, ofreció el martes sus condolencias a su homólogo Emmanuel Macron de Francia, por la devastación causada por el incendio en la catedral de Notre Dame en París, informó la Casa Blanca.
«Estados Unidos está con los ciudadanos franceses, la ciudad de París y los millones de visitantes de todo el mundo que han buscado consuelo en esa estructura emblemática», dice el comunicado.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, también señaló que la catedral ha servido como un hogar espiritual durante casi un milenio y, por eso, «nos entristece ver el daño a esta obra maestra arquitectónica. Notre Dame continuará sirviendo como un símbolo de Francia, incluida su libertad de religión y democracia».
Recordó que los franceses son aliados de Estados Unidos y agradeció cuando las campanas de la catedral sonaron el 12 de septiembre de 2001, en honor a los ataques del 11 de septiembre.
«Esas campanas sonarán de nuevo. Estamos con Francia hoy y ofrecemos nuestra asistencia en la rehabilitación de este símbolo insustituible de la civilización occidental. ¡Viva Francia!», puntualiza.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, dijo que Notre Dame será reconstruida y algunas compañías francesas y las autoridades locales prometieron más de 700 millones de euros; incluso, tres familias multimillonarias que poseen los imperios de bienes de lujo de Francia, Kering, LVMH y L’Oreal anunciaron la ayuda de 500 millones más.
Según Reuters, El incendio también ha promovido la recaudación de fondos entre los estadounidenses, con la French Heritage Society, con sede en Nueva York, y la plataforma de crowdsourcing Go Fund Me, entre las primeras en ofrecer ayuda.
Con información de La Voz de América
