El peso argentino se desvalorizó un 4% en un día y ya lleva un 13% de devalorización en lo que va del año, transformándose en una de las monedas emergentes que más sufre la devaluación en el mundo frente al dólar estadounidense.
Esta situación compromete todo el esquema diseñado por el gobierno junto al Fondo Monetario Internacional, FMI, para superar la crisis económica y, tiene como correlato, aumentos muy grandes en los precios y tarifas, mientras los sueldos no suben y la conflictividad social en las calles está creciendo.
El Ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, intentó calmar a los mercados y a la población.
«Con respecto al dólar, tuvimos dos días feriados en la Argentina y algunos movimientos externos, no encontramos todavía causas de preocupación con los margenes de intervención que tiene el Banco Central de la República».
Mientras tanto, en los supermercados y en los comercios, el panorama es de preocupación.
«Los precios son exorbitantes, por ejemplo la verdura de hoja, es terrible el precio»… «cuando hay una disparada cambiaria o corrida cambiaria los precios de la canasta básica aumentan».
En el Congreso de la nación, el diputado del Peronismo opositor y exgobernador de la provincia de Buenos Aires, Felipe Solá, advirtió sobre la falta de capacidad del gobierno.
«El gobierno se llenó de CEO, gente que estudió afuera o que hacia negocios, esos tipos podían conocer mucho de Washington o de Ginebra pero de Argentina conocían muy poco, y eso está a la vista. Este gobierno baja la autoestima de los argentinos, los argentinos tenemos que flagelarnos porque tenemos un ministro como Dujovne o un incapaz como el presidente», dijo Solá.
Con información de La Voz de América
