Fotos: Raquel Yancor.
Hace dos siglos, en 1825, la historia marcó un antes y un después para el occidente de Guatemala.
La entonces villa de Quetzaltenango recibió el título de Ciudad, un reconocimiento merecido por su desarrollo, su gente trabajadora y su papel protagónico en la construcción de la identidad nacional.
Por decreto legislativo emitido el 29 de octubre de 1825, el entonces pueblo o villa de Quetzaltenango fue declarado oficialmente Ciudad, marcando un momento histórico en su desarrollo político y social.
Desde aquel momento, Xela se consolidó como una de las ciudades más representativas del occidente guatemalteco y símbolo del progreso de todo un pueblo.
Quetzaltenango se convirtió en símbolo de progreso, cultura y valentía. Su espíritu indomable la llevó a ser capital del Sexto Estado, reflejo del orgullo, la autonomía y la visión de grandeza que caracteriza a los quetzaltecos.
Doscientos años después, la ciudad sigue caminando con la misma fuerza que impulsó a sus antepasados, siendo hoy la segunda ciudad más importante de Guatemala, cuna de artistas, intelectuales, empresarios, educadores y soñadores que trabajan cada día por un mejor futuro.
Esta conmemoración no solo celebra una fecha histórica, sino también la esencia de un pueblo que no se rinde, que mantiene vivas sus tradiciones, su cultura y su amor por la tierra del Quetzal y del volcán Santa María.
Que este aniversario sea una oportunidad para mirar atrás con orgullo, vivir el presente con compromiso y mirar al futuro con esperanza.
¡Felicidades, Quetzaltenango! 200 años de historia, cultura y grandeza.
Porque aquí, en el corazón del occidente, late el orgullo de una ciudad que nunca deja de soñar.
