Por Fredy de León
La Red Nacional por la Defensa de la Soberanía Alimentaria, -REDSAG- y otras instituciones organizaron un intercambio de semillas nativas y criollas como un acto de resistencia y defensa de las semillas, las que permiten mantener la alimentación y conocimientos ancestrales.
“Queremos contribuir con las comunidades y diferentes pueblos a que tengan acceso a alimentos sanos y nutritivos”, dijo Awex Mejía de la REDSAG, “es importante que jóvenes, mujeres, niños, niñas y personas adultas podamos retomar las prácticas de producir nuestras propias semillas, para garantizar nuestra alimentación y de las futuras generaciones”, agregó..
La promoción de las semillas nativas, también va enfocada en apoyar la economía local, comunitaria y solidaria además del acceso a alimentos sanos y así evitar la dependencia de empresas externas y transnacionales.
Por su parte el señor David Paredes, dice que debemos valorar las semillas nativas y criollas, “hay una amenaza constante a nivel mundial sobre todo el tema del avance de grandes empresas que producen semillas transgénicas, actualmente Guatemala está amenazada, hay un reglamento de organismos vivos modificados transgénicos que está vigente, por parte del Ministerio de Agricultura y Ministerio de Economía, se ha parado con procesos jurídicos”, agrega.
Guatemala es un país megadiverso, además es un país de origen, es decir que hay muchas semillas que tienen su origen aquí, de maíz, de legumbres o chiles, todo esto está amenazado por el ingreso de este tipo de semillas transgénicas, que contamina genéticamente los recursos.