Declarar una emergencia requeriría que los países intensificaran con urgencia sus acciones para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Un número cada vez mayor de gobiernos tiene el objetivo de alcanzar un nivel de emisiones cero o de lograr ser neutrales en carbono, pero pocos tienen planes detallados sobre cómo llegar allí mediante planes ambiciosos para el 2030 como hito intermedio.
Muchos países también están invirtiendo recursos en actividades con alto contenido de CO2 mientras se esfuerzan por recuperarse de la crisis y la recesión provocada por el coronavirus. Guterres señaló que los países del G20 estaban gastando un 50% más recursos en sus paquetes de estímulo a los combustibles fósiles y a los sectores intensivos en CO2 que a la energía baja en CO2.
Más de 70 líderes mundiales, activistas de la sociedad civil, jefes de empresas y alcaldes de las ciudades asisten a la cumbre de ambición Climática, que se celebra en el quinto aniversario del histórico acuerdo climático de París.
