El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, inyectó nuevo drama a una ya tensa reunión del Grupo de los Siete países más industrializados, G-7, el viernes, al pedir que Rusia, expulsada del grupo por su anexión de Crimea, sea reinstaurada.
Trump hizo el comentario en la Casa Blanca el viernes horas después de escalar la retórica contra los aliados de larga data por prácticas comerciales.
“Por qué estamos teniendo una reunión sin Rusia? preguntó Trump. “Deben permitir que Rusia regrese porque debemos tener a Rusia en la mesa de negociaciones”.
Rusia fue destituida del G-7 en 2014 como castigo por la anexión de Crimea autorizada por el presidente Vladimir Putin y su apoyo a separatistas pro rusos en Ucrania.
Trump llegará el viernes a la reunión del G-7 en Quebec, Canadá, pero partirá el sábado por la mañana antes de que la cumbre haya finalizado, para asistir a su reunión con el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, en Singapur.
La Casa Blanca anunció los planes de viaje del presidente después que el presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, señalaran que usarían la cumbre del G-7 para afirmar su posición contra los nuevos aranceles a las importaciones del acero y el aluminio.
“Esperamos enderezar nuestros injustos acuerdos comerciales con los países del G-7” tuiteó Trump el viernes temprano. “Si no sucede, salimos mejor aún”.
En una conferencia de prensa conjunta el jueves, Macron dijo: “Una guerra comercial no perdona a nadie. Comenzará a afectar primero a los trabajadores estadounidenses”.
Trudeau dijo: “Vamos a defender a nuestras industrias y nuestros trabajadores”.
Según Trudeau la acción de Trump afectaría a los trabajadores estadounidenses y canadienses.
“Si puedo hacer que el presidente se dé cuenta en realidad de que lo que está haciendo es contra productivo para sus propias metas también, quizás podamos avanzar en una forma inteligente”, indicó Trudeau.
Con información de La Voz de América
