Por Erick Colop
La Policía Nacional Civil (PNC) implementó, desde hace poco más de una semana, un puesto fijo para resguardar a los pilotos de buses, debido a las amenazas de extorsión y ataques armados.
Se conoció que el plan tiene como objetivo vigilar a los pasajeros que abordan los buses y controlar a vendedores, porque según las investigaciones, se conoce que son ellos los que entregan teléfonos o cobran las extorsiones.
“Es bueno que este la Policía, porque hay que brindar seguridad”, dijo uno de los pilotos, quien por seguridad, omitió su identidad.
Las empresas de buses que han paralizado servicio por amenazas son: Golondrina y Barrios, la primera que cubre la ruta entre Xela y Coatepeque, y la segunda de Xela a Cajolá.