El amamantamiento de los bebés una hora después del nacimiento aumenta significativamente sus posibilidades de supervivencia, informa la Organización Mundial de la Salud, citando datos de 76 países que encuentran que la leche materna es rica en nutrientes y anticuerpos saludables.
Sin embargo, solo el 40 por ciento de los bebés son amamantados en la primera hora de vida, según el especialista en alimentación infantil y lactantes de la OMS, Laurence Grummer-Strawn.
«El retraso de la lactancia materna pone a los bebés en mayor riesgo de infección y, en última instancia, aumenta el riesgo de muerte. Solo retrasar más allá de la primera hora puede aumentar la mortalidad en aproximadamente un tercio, y esperar hasta el segundo día duplica la tasa de mortalidad», indicó.
Las peores tasas se encuentran en el este de Asia y el Pacífico, donde solo el 32 por ciento de los bebés son amamantados en la primera hora después del nacimiento, dijo Grummer-Strawn. Agregó que las cifras son mucho mejores en África, con el este y el sur de África con tasas promedio del 65 por ciento.
«Lo que es interesante es que esto varía enormemente de un país a otro», dijo. «A medida que miramos a través de África, puede ver algunos países que tienen tasas muy bajas, de 20 por ciento, pero otros países, el 90 por ciento. Del mismo modo, en Asia,hay una diferencia sustancial de un país a otro».
Grummer-Strawn dice que la diferencia en las tasas no obedece a patrones regionales, sino principalmente al tipo de educación y atención médica que prevalece en un país.
El informe advierte que la fórmula u otras bebidas no deben administrarse a recién nacidos a menos que sea absolutamente necesario. Dice que la fórmula puede ser peligrosa porque a veces se mezcla con agua contaminada y retrasa el primer contacto crítico del bebé con su madre.
Con información de La Voz de América
