Con información de Henry Popá.
Quetzaltenango. El gobernador departamental de Quetzaltenango, Julio César Quemé, refiere que la explosión del lunes pasado en una tortillería de la ciudad altense, no iba dirigido hacia ese negocio sino que a una casa aledaña donde aparentemente vendían drogas al menudeo.
Quienes habitaban la vivienda a la que iba dirigido el ataque, alquilaban y desocuparon el martes por la mañana.
Queme pide a los propietarios de viviendas, que verifiquen e investiguen a las personas que soliciten renta.
El gobernador refiere que estructuras del crimen organizado, sicariato y narcotraficantes, se han instalado en la ciudad. Agrega que por esta situación están trabajando en conjunto con la Policía Nacional Civil (PNC) para reforzar la seguridad.