El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, participó este martes en la segunda jornada de la Convención Nacional Republicana y aprovechó su intervención para alabar las «audaces iniciativas» del presidente Donald Trump en política exterior.
«Cumpliendo con su obligación de mantenernos seguros al tiempo que nuestras libertades permanecen intactas, este presidente ha liderado audaces iniciativas en cada rincón del mundo», afirmó Pompeo en un vídeo grabado en Jerusalén, donde se encuentra estos días de visita oficial.
El funcionario destacó que además de ser el jefe de la cartera de Exteriores, tiene otro «gran trabajo»: el de marido y padre, y sostuvo que las libertades de los miembros de su familia están mejor aseguradas «porque el presidente Trump ha puesto su visión de Estados Unidos Primero en acción».
«Puede que no le haya hecho popular en cada capital extranjera, pero ha funcionado», afirmó Pompeo.
La intervención de Pompeo, la primera de un secretario de Estado estadounidense en activo en una convención partidista, sirvió al funcionario para repasar algunas de las decisiones más controvertidas de la Administración Trump.
En primer lugar, Pompeo resaltó la relación de Estados Unidos con China, país con el que el Gobierno pasó más de dos años negociando un acuerdo comercial cuya primera fase de implementación se encuentra en suspenso a raíz de la pandemia del coronavirus.
«En China, ha retirado la cortina de las agresiones carroñeras del Partido Comunista Chino», aseguró al señalar que Trump «ha hecho responsable» al gigante asiático por el «encubrimiento» del brote del «virus chino», a pesar de que el propio mandatario ha rechazado adoptar represalias debido a la importancia del acuerdo comercial entre ambos países.
Asimismo, Pompeo encomió al mandatario estadounidense por «bajar las temperaturas» en las relaciones con Corea del Norte,obviando que fue el intercambio de exabruptos entre el propio Trump y el líder norcoreano, Kim Jong-un, el que dio lugar en 2017 a una escalada de tensión entre ambos países no vista en décadas.
Acciones en Oriente Medio
En cuanto al papel de Estados Unidos en Oriente Medio a lo largo de estos últimos casi cuatro años, Pompeo resaltó el acuerdo firmado recientemente entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos, que supone la normalización de las relaciones entre ambos países.
«El presidente gestionó un histórico acuerdo de paz entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos sobre el que nuestros nietos leerán en los libros de historia», apuntó.
Además, Pompeo celebró la decisión de Washington de trasladar su embajada en Israel a Jerusalén, «la legítima capital del Estado judío».
Mención aparte mereció la lucha estadounidense contra el yihadismo e Irán.
“Cuando el presidente asumió el cargo islamistas radicales decapitaban a estadounidenses y el Estado Islámico controlaba un territorio del tamaño del Reino Unido. Hoy, gracias a la determinación y el liderazgo del presidente, el califato del EI ha sido borrado, ya no existe. Su diabólico líder, Abu Bakr al-Baghdadi, está muerto”, celebró.
En cuanto a Irán, el jefe de la diplomacia estadounidense, sostuvo -sin entrar en detalles- que cuando Teherán «amenazó» a Washington, Trump respondió ordenando un ataque que acabó con la vida del «terrorista» Qasem Soleimaní, general de la Fuerza Quds iraní.
«Como soldado, vi de primera mano a gente desesperada para huir en busca de la libertad. La mejor manera en que podemos garantizar nuestra libertad es eligiendo a líderes que no solo hablan, sino que cumplen», concluyó Pompeo.
Con información de Rafael Salido / La Voz de América
