Por Shirlie Rodríguez |
Los transportistas son un sector afectado por la pandemia del COVID-19 y está dejando pérdidas millonarias. Hasta el momento la Municipalidad de Quetzaltenango no tiene un plan preparado para cuando los buses urbanos inicien a funcionar.
Edgar Guerra, de la Defensoría del Usuario del transporte público de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), menciona que las autoridades de la Muni de Xela le han solicitado apoyo para trabajar en el protocolo que se estaría implementado para cuando funcione de nuevo el servicio.
Según Guerra, en Xela se debe hacer un plan más complejo porque hay diversidad de unidades (microbuses, combis y camionetas), por ello, se deben establecer medidas de seguridad para cada caso y así la población tenga la seguridad del usar el servicio.
Durante años, la Municipalidad de Quetzaltenango ha fallado en sus intentos para regular los buses urbanos, porque el censo no es aceptado por todos los transportistas y se mantienen las unidades en mal estado y los usuarios constantemente denuncian mal servicio.
