Por Carlos González |
La Oficina de Seguridad y Prevención de Bomberos Voluntarios de Quetzaltenango informó, en fecha reciente, que por cada alerta falsa de emergencia tienen una pérdida económica de unos Q350, por ello, los socorristas hicieron el llamado a los vecinos para llamar solo para emergencias reales.
El vocero de Bomberos Voluntarios, Adoni Cifuentes, explicó que dentro de los gastos se incluye desgaste de vehículos, combustible (dependiendo las distancias) y ahora el uso de equipo especial de protección para los socorristas por la pandemia del COVID-19.
«Los socorristas tenemos trajes especiales de protección, los cuales son muy importantes durante la pandemia», expresó Cifuentes.
Se calcula que los socorristas reciben, por lo menos, unas 10 llamadas falsas por semana.
En uno de los últimos casos, alertaron de un ataque armado en contra de una mujer, en la diagonal 15, zona 1 de Xela. Al llegar la unidad de bomberos y cinco patrullas de la Policía Nacional Civil (PNC) constataron que se trataba de una falsa alarma.