Por Rubén Jocol |
El Circo Hermanos Ramos, ubicado en la zona 9 de Quetzaltenango, abrió esta semana al público tras más de siete meses cerrado por la pandemia del COVID-19.
Los integrantes del circo indicaron que esta semana colocaron la carpa y recibieron la autorización para volver a las funciones. Mencionan que durante la pandemia optaron por generar ingresos con la venta de palomitas de maíz y manzanas con caramelo con un precio menor al que se vendían en el circo.
“Lo prometido es deuda”
«El sábado estaremos brindando tres funciones gratuitas para la población, siempre cumpliendo las medidas de seguridad y con un número limitado de asistentes, esto para agradecer el apoyo de los quetzaltecos quienes estuvieron apoyando al circo”, indica Franco Ramos.
Las funciones del sábado serán a las 16.30, 18.30 y 20.30 horas y los dirigentes del circo mencionan que el domingo no le pondrán costo a las funciones, sino que pedirán a los asistentes una colaboración voluntaria. Les piden a las personas portar mascarilla y cumplir con el distanciamiento.
“Se ha pensado inicialmente en que estas funciones sean, específicamente, para los niños que han estado confinados en casa», comenta Ramos
Los dirigentes del circo mencionan que esperan una inspección del Centro de Atención Permanente (CAP) para marcar los espacios y seguir su protocolo.
El circo estará lo que resta de octubre y noviembre en Xela, y dependiendo de la aceptación del público, podrían extender sus presentaciones hasta diciembre.
Desde que llegaron a Xela, en marzo, el circo solo se presentó en una ocasión y durante la pandemia se innovaron, porque presentarán varios personajes, entre ellos, Lobo Vásquez.
