José Luis Sacalxot, originario de Cantel, llega el miércoles reciente al Instituto Normal Experimental Dr. Werner Ovalle López, en la 25 avenida, zona 3 de Xela, para unos trámites de su hijo. Al salir del centro educativo, luego de 30 minutos, su vehículo ya no estaba.
De acuerdo a la víctima, el picop Toyota P015DHV lo deja estacionado afuera del establecimiento.
«Yo le pido a las personas que ya no compren chatarra y así ya no sigan robando carros», dice Sacalxot.
José Luis dice que este vehículo es una herramienta importante en su trabajo. «El carro me sirve para trabajar, soy herrero y ahora no sé qué hacer», menciona.
En lo que va del año, de acuerdo a denuncias, se contabilizaban al menos cinco casos de robo de vehículos y motocicletas en Quetzaltenango.
Con información de Erick Colop