River Plate, Independiente y Temperley están involucrados en denuncias de abuso sexual de juveniles en el fútbol argentino. Las víctimas eran tentadas a mantener relaciones sexuales con mayores a cambio de dinero, promesas de ascenso de división y mercancías como calzado deportivo.
Las canteras en los grandes clubes de fútbol han sido infiltradas por una gigantesca red de pedofilia: esta es la hipótesis que está manejando la justicia argentina mientras avanza la investigación de lo que comenzó con una primera denuncia sobre prostitución de menores en el Club Atlético Independiente.
En este caso, ya hay cinco detenidos. Entre ellos se encuentra un árbitro, un representante de jugadores juveniles y un organizador de torneos infantiles. Las familias de siete menores han presentado denuncias por abusos pero serían muchos más los afectados.
La misma red que operaba en Independiente lo habría hecho también en el Club Atlético Temperley. Este lunes se han presentado denuncias por abusos de tres menores entre 2004 y 2011 en otro grande: River Plate.
Según la fiscal a cargo de la investigación, María Soledad Garibaldi, los pedófilos violaban a los jóvenes más pobres de la pensión del club a cambio de zapatillas o de un poco de dinero.
Todos los grandes clubes tienen este tipo de pensiones, en donde decenas de niños seleccionados por su potencial futbolístico en todo el país. Ahí se van formando en las divisiones inferiores, lejos de sus familias, supuestamente en un marco seguro, con el sueño de llegar un día a la cima.
Con información de Radio Francia Internacional
