El alcalde de Quetzaltenango, Luis Grijalva, enfrenta siete procesos de antejuicio, los cuales fueron promovidos el año pasado. Los casos van desde denuncias de vecinos hasta hallazgos encontrados por la Contraloría General de Cuentas (CGC) durante auditorías desarrolladas en su gestión.
De los siete procesos, tres fueron dados sin lugar por parte de la Sala Quinta de Apelaciones por no reunir los medios suficientes de prueba para retirarle la inmunidad.
Grijalva justifica que los procesos se derivan de conflictos políticos que pretenden “desgastarlo en su administración”. Añade que los antejuicios representan gastos innecesarios.
Uno de los antejuicios es promovido por tres concejales del bloque de oposición, quienes denuncian que el alcalde no les brinda información de la deuda que tiene la comuna con el INDE.
El jefe municipal dice que el proceso busca dañar su imagen, aprovechando que es un proceso preelectoral, por ello, es utilizado como una estrategia política.
Con información de Shirlie Rodríguez
